sábado, 5 de septiembre de 2009

Las mentiras feministas más comunes


Carlos Caldito es uno de esos cerebros críticos con el feminismo radical que generan reflexiones que uno no puede perderse. En esta ocasión cito parte de un artículo en el que muestra, una a una, algunas de las mentiras de ese feminismo que tanto daño nos está haciendo:

Los “grupos feministas” suelen afirmar –como un dogma de fe- que las mujeres están “sojuzgadas, oprimidas, marginadas, etc.", que hay una verdadera conspiración de lo que llaman “clases hegemónicas del patriarcado masculino, heterosexual e imperialista” contra ellas. E incluso, también afirman que las mujeres no tienen apenas acceso a las instituciones, que no se les permite tener capacidad de decisión, que no se las respeta, etc. Pero, ¿Todo ello es realmente cierto? La consigna feminista de que la "mujer española, europea, occidental" es una "víctima" impotente es una idea absolutamente absurda, que se ha ido imponiendo con machaconería, acabando por instalarse como un axioma que nadie se atreve a cuestionar… La tozuda realidad es muy diferente: - Las mujeres españolas viven, como media siete años más que los hombres. - Las mujeres controlan de “facto” más del 80% de las rentas familiares y son ya más del 55% en la universidad. - Las mujeres representan alrededor del 55% de los votos en cualquiera del las elecciones que se convocan en España, motivo por el cual difícilmente pueden las feministas afirmar que están siendo dejadas de lado en el proceso de toma de decisiones políticas… - Las mujeres tienen a priori ganado, de manera sistemática cualquier contencioso referido a custodias de menores tras el divorcio. - Las muertes ocurridas por accidentes laborales afectan escasamente a las mujeres (un 6% únicamente, el otro 94% es cosa de hombres) - Sólo en el 35% de los crímenes violentos las víctimas son mujeres; pese a ello, el Parlamento ha legislado una normativa especial para castigar "la violencia contra las mujeres" como si ésta fuera un crimen más horrendo que el de "la violencia contra los hombres". (Este es un ejemplo de lo que la "igualdad" significa para el fundamentalismo feminista, esto en castellano se denomina trato de favor…) - Dos de cada tres euros que el Sistema Nacional de Salud gasta, van destinados a las mujeres; e incluso, sin tener en cuenta los cuidados relacionados con la maternidad, las mujeres reciben más atenciones que los hombres. A pesar de ello las feministas siguen gritando que la salud de las mujeres está "descuidada"... - De los 25 empleos peor considerados, teniendo en cuenta factores como salario, stress, seguridad y esfuerzo físico, 24 de ellos son predominantemente, si no son casi en su totalidad, masculinos. Evidentemente esto explica por qué los varones suelen ser más propensos a suicidarse (80%) Si tal como repiten hasta el hartazgo las feministas (que los hombres han planeado todo, de manera egoísta, para que el mundo en que vivimos sólo sea maravilloso para ellos, obviando totalmente las necesidades y los intereses de las mujeres) ¿tendría algo de verdad todo aquello de lo que hablábamos al principio? Por supuesto que no. Si se observa con las gafas apropiadas la realidad tal cual es, y no la caricatura, la imagen distorsionada que nos presenta el fundamentalismo feminista, y todos aquellos a quienes han acabado manipulando, lograremos ver una situación completamente diferente. Las mujeres españolas, occidentales constituyen el grupo social con mayores privilegios de la historia de la humanidad, ostentando (o ¿tal vez detentando?) una capacidad de influencia, un grado de poder, de bienestar, y salud nunca antes conocidos,…

Claro, como todo es "Por ellas, para ellas... y de ellos"...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muchos hemos sabido siempre que todas esas afirmaciones feministas eran PATRAÑAS, pero aún así conviene que alguien las escriba sistemáticamente para que todos lo tengan presente.
Es curioso cómo se selecciona lo que interesa de las estadísticas, y como se dice en esta entrada, con repetirlo machaconamente parece acabar convirtiéndose en un axioma incuestionable.
La crisis está acabando con dos empleos de hombres por cada empleo de mujer. Las mujeres, lo dicen las mismas estadísticas oficiales que se esgrimen para otras cosas, son quienes controlan el presupuesto familiar (como dice la entrada y confirma la simple observación). Los hombres somos quienes más violencia y más homicidios sufrimos con muchísima diferencia (lo dicen también las estadísticas oficiales), aunque la que nos afecta no sea una "tragedia nacional" y sí la de ellas. Etc etc.