domingo, 21 de enero de 2024

Pues claro que estamos discriminados

https://www.elmundo.es/espana/2024/01/20/65abd18ee4d4d81d298b456e.html

De cualquier cuestión referida a la estética de las mujeres de izquierdas no se puede hablar porque es misoginia, heteropatriarcado y falocentrismo, pero ellas pueden hacer referencia a la calvicie de un diputado del PP con toda la suena del mundo sin que pase nada.

Es la doble moral, las mujeres y las izquierdas tienen derecho a todo, los hombres y las derechas a nada. Sigue estando permitido que una mujer abofetee a un hombre si le toca sin consentimiento, pero a la inversa la gente se ríe y se toman el que una mujer te coja el culo como un elogio. Cuando una mujer quiere sexo lo consigue con facilidad porque siempre hay algún hombre dispuesto a dárselo, cuando un hombre quiere sexo a menudo paga por ello. No hay programas de salud específicos para cáncer masculino como los hay para el femenino, ni para abordar las obvias diferencias de género en cuanto al suicidio o los fallecidos por accidentes de cualquier tipo, no se publican las cifras de hombres asesinados por sus mujeres ni las de denuncias falsas por violencia de género. La violencia que ejerce un hombre sobre una mujer es machista y sale en todos los periódicos mientras que la que se ejerce sobre ellos no es noticia y periodistas mujeres la ignoran intencionadamente. Los políticos en sus campañas hablan de los derechos de las mujeres pero no de los hombres. Se ataca a Arabia Saudí por no respetar los derechos de las mujeres mientras se ensalza a Ucrania que obligó a los hombres a quedarse en su territorio para que dieran la vida por su patria mientras permitía la salida de mujeres y niños. No hay cuotas para aquellas profesiones en las que las condiciones de selección favorecen a las mujeres y en las que a consecuencia de ello están sobre representadas pero sí para los hombres. Los trabajos más perjudiciales para la salud los desempeñan hombres en su mayoría, lo que puede estar incidiendo en la menor esperanza de vida. Un hombre no puede decidir sobre la vida o la muerte del hijo que está gestando una mujer porque se considera que no tiene derecho a ello al ser un mero donante de semen, pero luego sí que tiene que mantenerlo si la otra tiene a bien darle acceso a la vida. El trabajo doméstico de las mujeres se valora más que el del hombre, quizás porque ellas se venden mejor. Hay toda una industria del género que genera estudios a favor de la idea de que las mujeres están discriminadas y que etiqueta de machista todo intento de igualdad real y no ideológica, y tantas cosas más que darían para escribir un libro. Ah,no... Qué ya lo escribí en 2008 y poco parece haber cambiado desde entonces.

Sí, estamos discriminados. Y deberíamos salir del armario y defenderlo su que no sea fácil por toda esa pseudociencias que se ha generado en torno al feminismo de genero y todos los intereses ideológicos y sobre todo económicos que tiene por detrás,porque la vida de los hombres nunca se valoró más que como un medio para proveer de bienestar de las mujeres y porque, por mucho que nos digan, esto nunca fue un patriarcado.

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