Ana María Gutiérrez, 66 años, ama de casa: “A mí nadie me ha pagado un sueldo. Si mi marido me quiere dar algo, tendré. Si no, no tengo nada”

Ana María Gutiérrez, 66 años, ama de casa: "A mí nadie me ha pagado un sueldo. Si mi marido me quiere dar algo, tendré. Si no, no tengo nada" https://share.google/GbBspaTkRCYPs06fB

 Claro. Nunca tuvo una vida cómoda en su casa, entrando y saliendo cuando le diera la gana, sin las exigencias ni la privación de libertad de un trabajo convencional. Nunca tuvo que obedecer a nadie porque sí ni porque no o asumir tareas peligrosas porque eso ya lo hacían por ella. Nunca vivió en una sociedad de gananciales en la que por decreto todo es de los dos, ni tuvo un seguro de vida económico financiado por su esposo por el hecho de ser madre. Se queja con toda la razón del mundo, mientras su marido estuvo preocupado durante su vida sólo de trabajar, por supuesto para él y jamás para ella y para sus hijos, ella estuvo abnegadamente dedicada a su cuidado y puede enumerar todas y cada una de las cosas que hizo por él. Ya no quedan mujeres así, ahora ya nadie cuida de nadie.